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ESPAÑA
EL ABORDAJE QUIRÚRGICO DE ESTA REGIÓN ANATÓMICA REQUIERE DE EQUIPOS CON GRAN PERICIA
La mínima invasión para reconstruir pelvis, útil en osteoporosis del anciano
"La cirugía de pelvis es muy complicada debido a que es difícilmente abordable y reconstruible", ha explicado Antonio Herrera, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatológica en el Hospital Miguel Servet, de Zaragoza, en un curso sobre avances en los tratamientos quirúrgicos de esta región anatómica celebrado en la capital aragonesa.


José Luis Labat Zaragoza - Jueves, 17 de Febrero de 2011 - Actualizado a las 00:00h.


En el Hospital Universitario Miguel Servet de la capital aragonesa se han reunido 150 cirujanos de diversos hospitales de España (Barcelona, Sevilla, Madrid, Gerona y Zaragoza), especializados en la intervención de pelvis, en un curso de cirugía que abordaba los últimos avances en los tratamientos quirúrgicos de la pelvis.

El lugar para la celebración del curso no ha sido casual ya que, como ha apuntado Antonio Herrera, uno de los coordinadores de la jornada, "no en vano Aragón, además de contar con mucha y transitada montaña, posee una escuela de parapente que también contribuye, y no poco, a que los traumatismos y lesiones de la pelvis sean frecuentes". Lo que ocurre, además, es que "la cirugía de pelvis es muy difícil", ha señalado el jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatológica en el Miguel Servet, "porque es difícilmente abordable y reconstruible".

Región compleja
Tal y como ha explicado Herrera, la fractura de pelvis es muy frecuente en los traumatismos denominados de alta energía. Aquí habría que incluir los accidentes de tráfico que, aunque han descendido en número, su gravedad es extrema, y los accidentes o caídas en montaña, del parapente. "Pero es que, además de la pelvis, existen otros problemas añadidos como las complicaciones vasculares que conlleva, con una alta mortalidad o que puede generar graves secuelas". La pelvis -recuerda el profesor- es una región anatómica que contiene importantes vasos cuya rotura puede ocasionar gran sangrado. Además, allí se encuentran raíces nerviosas y órganos del aparato digestivo y urinarios, a los que se añade, en el caso de la mujer, el útero.

Herrera ha añadido que "el abordaje quirúrgico de esa zona requiere de equipos con gran pericia para acometer una cirugía resolutiva". Esta es la razón de la jornada celebrada en el Servet y en la que se han abordado cuestiones como la reconstrucción de la pelvis a partir de traumatismos o de fracturas que afectan a la articulación de la cadera (artrosis postraumática), los tumores en la pelvis y la reconstrucción de las prótesis de cadera.

Por su parte, Antonio Peguero, de la Unidad de Traumatismos y Tumores del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatológica y coordinador de la Jornada junto con Herrera, ha indicado que la cirugía mínimamente invasiva para la reconstrucción de una fractura de pelvis se enfoca a las fracturas osteoporóticas del anciano. En este sentido, "se han ideado sistemas poco agresivos para el anciano, con un menor número de infecciones, una recuperación más rápida y con menos daños colaterales, y lo realmente importante, con los mismos resultados que la cirugía abierta". Pero, a la vez, Peguero, refiriéndose a esta cirugía mínimamente invasiva, ha recalcado que "hay que ser un magnífico cirujano y poseer una gran experiencia y habilidad".

Por otra parte, en cuanto a cirugía tumoral, Peguero ha señalado que el reto de esta cirugía es "reconstruir cualquier defecto tumoral en hueso sin llegar a ser mutilantes". Ha apuntado cómo "con injertos de bancos de hueso llegamos a reconstruir la anatomía de la pelvis". Anualmente se realizan en el Servet medio centenar de operaciones de reconstrucción de pelvis por cirugía tumoral o para prótesis articulares, y de 35 a 40 intervenciones por traumatismos de alta energía.Por parte del Miguel Servet han intervenido en la jornada como docentes Herrera, jefe de servicio de COT, Peguero y Antonio Lobo, de la Unidad de Traumatismos y Tumores, y Juan José Panisello, de la Unidad de Artroplastias. Del Hospital Clínico Lozano Blesa de Zaragoza ha participado Juan Albareda, jefe de servicio de esta especialidad.

Además, intervinieron otros especialistas españoles en cirugía de pelvis, como Enrique Cáceres, del Valle Hebrón de Barcelona; Pedro Cano, del Virgen del Rocío de Sevilla; Francisco Chana, del Gregorio Marañón de Madrid; Santiago Gallardo, del Hospital Asepeyo de Barcelona; José Manuel Muñoz, del Josep Trueta de Gerona, y Alonso Zumbado, del Clínico de Barcelona.

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